domingo, 24 de abril de 2011

Con el tiempo se aprende a ignorar lo que hace peso y no sirve

"Enséñame tus manos, abre las palmas y ahora dime si aún te queda algo de esperanza en ellas. Enséñame tus manos, esas, con las que nos acariciamos y hoy nos hacemos tanto daño" -Alejandro Sanz.

¿Crees, acaso, que fue muy fácil aprender a vivir sin ti? Entonces.. porque lo haces más difícil. 
Si me vas a odiar prefiero la indiferencia. Si me vas a amar, que sea en silencio. Si piensas en mi que sea en secreto.
Desde que le vi, amiga mía, y su nombre me diste, tengo a ese hombre siempre delante de mí. Por doquiera me distraigo con su agradable recuerdo, y si un instante le pierdo, en su recuerdo recaigo. Nosé que fascinación en mis sentidos ejerce que siempre hacia él se me tuerce la mente y el corazón; y aquí, en mi hogar, y en todas partes advierto que el pensamiento divierto con la imagen de Don Juan